El sexenio de Peña Nieto tiene todo a favor para hacer de México la nueva potencia emergente

Hoy asumió Enrique Peña Nieto como nuevo presidente mexicano, luego de una larga pero muy ordenada transición coordinada con el presidente saliente, el panista Felipe Calderón.

Vuelve el PRI a Los Pinos luego de doce años de ausencia, y con ello surgen las intrigas sobre qué gobierno será el de Peña?  Vuelve el PRI autoritario y obscuro? O hay un nuevo PRI como sostiene el presidente?

Por lo pronto, independientemente del aspecto mas político del análisis, Peña tendrá a su disposición un escenario para hacer historia, como pocos presidentes mexicanos lo han tenido.

1)Condiciones internacionales favorables: por su modelo de integración industrial con USA, la economía mexicana es muy dependiente de la demanda agregada del vecino del norte, por la que compite frente a frente con las importaciones de China.  Afortunadamente para la industria Mexicana, el costo laboral local pasó de ser 5 veces mas caro que el chino en 2000, a sólo un 30% mas caro en 2011, diferencia que se iguala por los costos de transporte que implica comprar en China, según un informe del banco HSBC.  El mismo informe indica que en el período 2000-2012 China pasó de tener una participación en las importaciones de USA del 8.2% al 17.9%, mientras que México sólo creció de un 11.2% al 12.3%.  Por la pérdida de competitividad China, se estima que México alcance el primer lugar para 2018 o antes (la estimación de 2018 es México con 16%, versus China 15.8%). A este contexto se le suma la desaceleración de Brasil, lo que pone a México como niña mimada de inversores y banqueros por su mayor expectativa de crecimiento (esto se desarrolla mas adelante)

2)Una estructura industrial muy eficiente: México es el mayor productor de manufacturas en la región, incluso sumando a Brasil, el resto de Latinoamérica produce menos manufactura que México.  Es uno de los mayores productores mundiales de refrigeradores, coches y televisiones, entre otras cosas.  Esta estructura está preparada para crecer, no sólo con maquila exportadora, pero también por resultado de una mayor demanda interna (ver punto siguiente)

3)Solidez macroeconómica:  El PAN deja el gobierno con unos números extremadamente ortodoxos: México tiene una relación deuda/PIB de sólo 30%, y una inflación de 3%-4%.   Sobre esta base, Peña puede darse el lujo (impensable en la mayoría del mundo que sólo está pensando en recortar gastos) de hacer política expansiva (como lo hicieron Brasil y Argentina los últimos años), tanto monetaria como fiscal, y de endeudarse para financiar cambios estructurales.  El país tiene la solvencia para atacar la pobreza con medidas que generan beneficios a corto plazo, como subsidios a las familias pobres sujetos a metas (obligación de asistencia escolar de los niños, etc.)

4)Bono demográfico: existe una relación en México de 2:1 entre gente que trabaja versus gente dependiente (niños y ancianos).  Esto es una gran ventaja para el sistema de pensiones, que es altamente (al menos en potencial) superavitario.

5)Control político: a pesar de no tener mayoría propia en las cámaras, el PRI y sus aliados aparentemente no tendrán problemas en lograr aprobaciones para leyes clave.  El PAN ya ha demostrado que apoyará reformas como la petrolera y la fiscal.   Además de esto, el PRI controla la mayoría de los estados.

Cuáles son los aspectos mas desafiantes que enfrentará Peña Nieto en su sexenio?

1)La Violencia: la guerra con el narco es la gran cuenta pendiente que le deja Calderón a Peña.   Sin embargo, las estadísticas (no del todo confiables según la opinión de opositores) muestran un amesetamiento e incluso una level reducción de las tasas de asesinatos, pero aún a un altísimo nivel de una 1.700 muertes mensuales.  El «votante común» tiene la esperanza que de alguna manera Peña «pacte» con los narcos, porque asume que existía un pacto anterior a 2000, pero el escenario narco de 2012 es totalmente diferente (mas atomizado y diversificado).

2)La educación: si bien en México aumentó mucho la tasa de escolaridad en los últimos 10 años, la calidad es pésima (la peor en la OECD).  Una población con baja calificación no puede incrementar a largo plazo su ingreso, sin comprometer la competitividad de la economía.  Otro indicador preocupante muestra que en México sólo el 22% de la población tiene formación terciaria, contra un 37% en Chile.  La educación es un problema que Peña Nieto tiene que empezar a resolver, pero no importa qué tan bueno sea su trabajo, los beneficios de la educación sólo se ven a largo plazo, lo que desincentiva a los políticos que no pueden recoger los frutos en su sexenio.  México gasta un generoso 6.2% de su PIB en educación, pero lo gasta mal en pésimos maestros, agrupados en sindicatos corruptos y violentos.

3)Los monopolios y los oligopolios: Un 40% de casi todo lo que se consume en México (bienes y servicios como petróleo, telefonía, televisión, alimentos, bebidas) están producidos por empresas monopólicas u oligopólicas.  El país necesita abrir estas industrias a la competencia, pero estos grupos de poder poseen lobbies fuertes, que utilizarán para prevenir la apertura en la medida que los dejen.

4)El «viejo PRI»: Peña Nieto tiene a su mayor peligro dentro de su partido.  Viejos políticos priistas, gobernadores, ex-gobernadores, legisladores que verán el regreso a Los Pinos como una oportunidad para restaurar viejas y malas costumbres, que corren el riesgo de desprestigiar el gobierno del Mexiquense.  Hoy, afortunadamente, la ciudadanía tiene a su  disposición mas información y medios para participar y exigir respeto a la ley, lo que permite disminuir en parte este riesgo.

Aún teniendo en cuenta estos riesgos que enfrenta México, la situación tiene un claro balance al lado positivo, al menos ese es el consenso de inversores y analistas.

Pareció en algún momento que la inclusión de México en el grupo de los Next-11, término acuñado por Goldman Sachs al igual que «BRICs», había sido apresurada.  Eso sucedió a fines de 2005, cuando Goldman incluyó a México junto con Indonesia, Bangladesh, Argelia, Pakistán, Nigeria, Filipinas, Turquía, Corea del Sur, Vietnam, Egipto e Irán en el selecto grupo de los países que sucederían a los BRICs (Brasil, Rusia, India, China) como mercados importantes de alto crecimiento.

Sin embargo, mucho de lo que se viene pronosticando desde 2005 está comenzando a suceder.

México escalaría del lugar 11 al 7 en el ranking mundial de economías

México creció mas que Brasil en 2011 y 2012 (3.9% y 3.8% versus 2.7% y 1.5% respectivamente).  Aunque Brasil se recupere en 2013, todos los analistas coinciden en señalar que el crecimiento de México será superior en la próxima década.   Algunos bancos, como el japonés Nomura, estiman que México podría pasar a Brasil y recuperar el liderato en América Latina (lo perdió en 2005) en la próxima década, aún cuando hoy el PIB de Brasil es el doble del de México (US$ 2.492 billones versus US$ 1.154 billones – 1 billón es un millón de millones, equivalente a «trillion» en inglés).  Nomura estima que las tasas de crecimiento de México en la próxima década serán de de 4.25%-4.75%, contra 2.75%-3.25% para Brasil.  El Banco mundial estima que la tasa de crecimiento para los próximos 40 años será del 4.7% para México, versus un 4.4% para Brasil.  Según esta institución (ver gráfica anterior), México pasaría del actual puesto 11 en ranking mundial de PIB, a un interesante puesto 7 en 2050, basado en PIB ajustado por poder adquisitivo (GDP PPP).

México tiene una gran ventaja respecto de muchos países emergentes, su crecimiento y su fortaleza es manufacturara, mientras que el boom en otros mercados emergentes ha estado mas relacionado con la explotación de commodities.  Esta industria deja un mayor legado a la productividad de una economía y en teoría es menos probable que esté expuesta a variaciones de corto plazo.   Por otra parte, México no ha explotado aún su potencial de commodities: la inversión privada en petróleo detonaría un gran crecimiento adicional, pero para eso, Peña y el pueblo mexicano deberán bajar del altar a la vaca sagrada  Pemex.